En la intimidad del estudio se iba a desatar la pasión...
Lady Cressida Armstrong siempre había sido la más inteligente y menos agraciada de la familia y sabía que su padre se había resignado a no poder casarla con nadie. Pero ¿quién necesitaba un marido cuando lo único que conseguía acelerarle el pulso era la ciencia y las matemáticas?
A pesar de lo decepcionado que estaba del arte, el pintor Gi...