¿Te imaginas que al canturrear una canción de pronto te trasladaras a otro mundo?, ¿y que en ese mundo fueras una mascota? Pues eso es lo que le sucede a Ismael: un día está en su casa y, al minuto siguiente, en una jaula con una chica llamada Sofía, un profesor y una gran araña parlante con afición por las matemáticas. Los cuatro deberán superar sus diferencias y colaborar para resolver el enigma...