¿Fútbol bueno…? ¿Jogo bonito…? ¡Qué eterna disyuntiva…!
Me dediqué en este ensayo sobre fútbol a formular infinitas preguntas e hice caso a Pedro González Calero en "Filosofía para bufones" cuando nos contó el caso de aquel ermitaño que gritaba por el desierto: "¡Tengo una respuesta, tengo una respuesta! ¿Quién tiene una pregunta?". No me extraña que el checo Milan Kundera, buen futbolero, llegase...