El pueblo, escribe el autor, dotado de un alma y un instinto inalienables, no puede ser abarcado por las estadisticas ni por los economistas, ni suplantado por los politicos. Tampoco los escritores romanticos supieron dar cuenta del espiritu del pueblo frances. Ese papel esta reservado al historiador que conoce el espiritu de sacrificio, el heroismo, la capacidad de accion, el sentido comun y otra...