Todos los enganos -o casi todos- vienen precedidos por senales, muchas de las cuales pasan desapercibidas a nuestros ojos porque no las queremos ver, tal vez porque nos duele enfrentar una realidad. Otras no las vemos sencillamente porque nadie nos ha ensenado ni explicado lo que es una senal de alerta, ni como identificarla entre todo lo que vemos a nuestro alrededor en nuestro dia a dia y, mas i...