Un periodista de El Espectador, Carlos Mario Correa, y un amigo y confidente suyo, Marco Antonio Mejía, cuentan una de las historias más duras y sórdidas del periodismo colombiano: la persecución que contra este periódico desató el cartel de Medellín, y concretamente Pablo Escobar. Aquí se narran los crímenes contra ese diario, desde el asesinato de periodistas y empleados, hasta los atentados a p...