Dicen que el enamoramiento juvenil nunca se olvida, tal vez porque es lo suficientemente puro y real. Después de años buscando a Anais Price, soñando con tenerla de nuevo a su lado, Federith Cooper ha de casarse con lady Caroline, puesto que lleva en sus entrañas al hijo de ambos, o eso piensa él. Pero su vida matrimonial es un infierno; su esposa rechaza su presencia, su ternura e incluso siente ...