La vida es una sucesión de encuentros, como las perlas en un collar. Conocemos y amamos, nos separamos y nos reunimos, compartimos las alegrías y las derrotas, y nos rompen el corazón.
Doris, de 96 años, ha tenido la misma agenda desde 1928. Ese librito rojo contiene su propio collar de perlas, las personas a las que ha conocido y querido a lo largo de su vida. Ahora Doris vive sola en un apartame...