Hoy dama de honor; mañana… ¿novia?
Dodie iba a ser la dama de honor de su famosísima hermana, la misma hermana que siempre la había hecho sentirse fea y gorda, así que solo podía hacer una cosa: ponerse a dieta. Y para eso necesitaba la ayuda de un entrenador personal.
Iba a hacer falta un milagro para que Dodie bajara dos tallas antes de la boda, sobre todo dada su debilidad por el chocolate. Per...