Emma Willis nunca se había imaginado a sí misma como modelo, y mucho menos en un calendario tan sensual como aquél… hasta que se presentó a una sesión de fotos sustituyendo a su hermana gemela. En cuanto se encontró frente al guapísimo fotógrafo Rafe Delacantro, ataviada tan sólo con aquella escueta lencería, se sintió sexy y más desinhibida que en toda su vida. Y antes de darse cuenta, estaba int...