En el invierno de 1858, Theophile Gautier, "e;el poeta impecable, el perfecto mago de las letras francesas y maestro y amigo"e; de Charles Baudelaire, se desprende de la "e;nostalgia azur"e; que siente por el Mediterraneo y se lanza al "e;vertigo del Norte"e;, a la gran Rusia. En pleno invierno, habiendo superado ya el trayecto que cruza Alemania, Gautier enlaza San Petersburgo con Mosc dando lu...