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© Paul Enders, 2020 – 2nd Edition
Impreso y editado por Books on Demand GmbH
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ISBN: 978-8-4132-6162-1
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Vallamos al grano. Siempre he sido gordo. No existe un tiempo en mi pasado que yo pueda recordar donde no haya tenido exceso de peso.
Yo era gordo cuando niño, cuando adolescente, y cuando adulto, y sé que no hay edad en la que "ser gordo" no tiene desventajas significativas. Se burlaban de mí cuando era niño, y cuando era adolescente. Y cuando las hormonas empezaron a activarse – probablemente ya puedes imaginarte.
Como adulto no salí adelante en mi carrera, y a menudo era superado por personas menos cualificadas - en las entrevistas de trabajo fracasaba ante personas bien parecidas... No es divertido ser gordo. Y lo peor de todo - la actitud que desarrollé; la disposición, los huesos fuertes, mis padres envejeciendo, la carga de malas experiencias en mi infancia - todo estaba mal. Todo menos la persona rellenando su cara con diversos alimentos y bebidas azucaradas: Yo.
Me ocupé con el mantra "Me siento bien tal y como soy" - si sólo hubiese utilizado una parte de la energía que estaba desperdiciando en convencerme a mí mismo y a todos los demás que yo estaba "sintiéndome bien" cuando en realidad estaba medias para sentirme realmente bien, probablemente hoy tendría un aspecto diferente, y mi vida habría marchado de otra manera.